El pasado viernes, día 22, pasamos una tarde entrañable de convivencia, en un entorno de plena naturaleza tan cercano como es La Molineta. El recorrido por El Cordel de la Campita nos llevó a descubrir, mediante un juego de pistas, un tesoro escondido. El paseo terminó con una merienda compartida al aire libre. Los menores, jóvenes voluntarios y las educadoras compartimos emociones y juegos en un ambiente lleno de fraternidad y cariño.